“Crónica de una Muerte Anunciada”: Silencio Ante la Tragedia
En 1981, el premio nobel de literatura colombiano, Gabriel García Marquez publicó una novela corta titulada “Crónica de una muerte anunciada”, la que después se convertiría en una de sus tantas obras maestras. Marquez como virtuoso de la prosa y del lenguaje, volvió a a reinventarse esta vez convergiendo el periodismo, la narrativa literaria, y el género policiaco. Esta novela se inspira en un hecho real ocurrido en 1951 en el municipio de Sucre, al sur del Departamento de Sucre, Colombia. Marquez logra en poco más de cien páginas hacernos reflexionar sobre el honor, el destino, y la moral colectiva.
Un Pueblo Silente Ante lo Inevitable
La historia se desarrolla en Venezuela, en un pequeño pueblo caribeño arraigado a normas sociales y culturales bastante conservadoras. Santiago Nasar, es cabeza de una de las familias más privilegiadas del pueblo, y desde el inicio de la novela, nos dicen que lo van a matar. Conforme avanzamos a través de las páginas del libro se va esclareciendo que Santiago fue culpado injustamente, cosa que los lectores sabemos, pero el pueblo jamás logra descubrirlo del todo. El inicio del fin de Santiago Nasar se desencadena cuando el adinerado, Bayardo San Román, descubre que su esposa Angela Vicario no era virgen, devolviendola a su familia. Ángela, bajo la presión y la violencia de sus hermanos, culpa a Santiago Nasar de su deshonra, lo que provoca que sus hermanos busquen venganza.
Los hermanos Vicario, Pedro y Pablo, obligados por un arcaico código de moralidad y honor familiar bastante, anuncian publicamente la intención de matar a Santiago. Esto lo hacen para que de alguna u otra manera Santiago se entere y huya del pueblo, ya que los hermanos Vicario no quieren tener que matarlo. Sin embargo, pese a que todo el pueblo se entera de esto, la desidia de estos es lo que finalmente lleva a Santiago hacía su muerte. Haciendolos a todos responsables de esto, aunque sea de manera indirecta.
La Complejidad de los Personajes
Como García Marquez lo demostraría 14 años antes con “Cien Años de Soledad”, una enorme cantidad de personajes no serían problema para él. Todos y cada uno de ellos tienen dentro de si una ambigüedad moral surreal. Los personajes están entrelazados por una fina linea de causalidad que hace que todos los hechos presentados por Marquez sean necesarios para llegar al anunciado final. La naturaleza colectiva de la trama presenta a Santiago Nasar como un joven soñador y de corazón bondadoso, que, a pesar de sus defectos, es una víctima inocente de un destino trágico.
Ángela Vicario, en cambio, es una figura ambigua, atrapada entre las expectativas de su familia y su propia capacidad de decisión. Su acusación nunca es completamente justificada, lo que añade un nivel de incertidumbre y complejidad a la historia. Bayardo San Román es un personaje enigmático, cuya llegada al pueblo desencadena los eventos centrales de la trama. Su retorno 17 años después, con las cartas de Ángela aún sin abrir, sugiere una resignación al destino que marca la vida de todos los personajes.
El Honor y la Moral en Conflicto
El tema del honor familiar es recurrente en las historias de García Marquez. En la novela y es presentado como un mecanismo inescapable que obliga a los personajes a actuar en contra de sus propios deseos. Esta concepción del honor, implacable y vengativo, es lo que finalmente lleva a la tragedia de Santiago Nasar. García Márquez no solo examina el honor como un concepto abstracto, sino que lo muestra en acción, revelando cómo puede ser utilizado para justificar incluso los actos más violentos.
La novela está escrita en primera persona, ya que el narrador también es un personaje importante dentro de la narrativa, porque representa a un amigo de Santiago que fue testigo de los sucesos, y que años después sería el periodista que escribiría la crónica años después. La historia no es lineal, y es contada desde diferentes perspectiva, lo que enriquece la complejidad del relato y subraya la ambigüedad de la verdad.
Conclusión
“Crónica de una muerte anunciada” es una de las obras imprescindibles de García Márquez, una muestra de como un buen periodista se puede convertir e un gran novelista. Y esto debido a que un periodista siempre tratará de ser lo más concreto y objetivo posible. Es por eso que en libros como “Cien años de soledad” podemos leer como García Márquez es capaz de contar hechos que acontecieron en 1 año, entan solo un par de páginas, porque es concreto y va directo al grano. Actualmente podemos encontrar un estilo similar en las obras de Fernanda Melchor, quien tiene un estilo similar.